Nuestra Historia Real
Todo comenzó cuando me di cuenta de que muchas empresas tomaban decisiones financieras importantes basándose en corazonadas. En 2018, trabajando como consultor independiente, vi cómo varios clientes perdían oportunidades por no saber interpretar las señales que el mercado les enviaba constantemente.
La idea de carvexilora surgió de esa frustración. Queríamos crear un espacio donde el análisis financiero fuera accesible, pero sin simplificar demasiado. Los mercados son complejos, y pretender lo contrario hace más daño que bien. Así que decidimos apostar por la educación honesta y el análisis profundo.
Hoy, después de seis años, seguimos con la misma filosofía: preferimos tener clientes que realmente entiendan lo que hacen, aunque eso signifique rechazar algunos proyectos que buscan soluciones inmediatas.